En nuestro espacio futbolero viajamos a la década de 1960 y repasamos la consagración de Racing Club como campeón americano y luego campeón mundial, el primero de los clubes argentinos en lograr la hazaña. Lucas Napoliello nos llevó de viaje a una época convulsionada políticamente en el continente, un preanuncio de los años que se vendrían en la década siguiente.
La recordada Batalla de Montevideo
“La de 1967 fue la Copa Libertadores más larga de la historia de las copas libertadores“. La final se jugó a tres partidos y ahí “Racing se termina consagrando campeón de América por primera y única vez, con el famoso equipo de José, que tenía un verdadero equipazo con nombres como Roberto Perfumo, Alfio Basile, el Bocha Maschio, el Chango Cárdenas. Un verdadero equipazo que fue el primer equipo argentino en consagrarse campeón intercontinental ese mismo año, en la llamada Batalla de Montevideo“.
El mismo día en que Racing disputaba la final de la copa Libertadores en Paraguay se reunía la Asociación Latinoamericana de Libre Comercio, una suerte de precursora de lo que muchos años después fue el MERCOSUR, una especie de tratado de libre comercio entre los países de la región.
“¿Quién fue el anfitrión de ese encuentro?”, se preguntó Lucas. Nada más y nada menos que Alfredo Stroessner, dictador paraguayo que estuvo casi 50 años en el poder. “En la región en esos años gobernaba un séquito de genocidas, dictadores y demás en países como Bolivia y México, con el caso de Juan Carlos Onganía en nuestro país”.
Mientras continuaba la guerra de Vietnam, el che Guevara era asesinado, el boxeador Muhammad Ali se negaba a ir a pelear en el sudeste asiático, en México se masacraba a los estudiantes en Tlatelolco, Clarín titulaba que los comunistas aterrorizaban a la población vietnamita y Racing, fiel a su costumbre, llevaba una alegría al pueblo argentino, como supo hacer en 2001 en plena crisis socioeconómica.
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